Génesis 22:1-10
Reina Valera Contemporánea (RVC)
Dios ordena a Abrahán sacrificar a Isaac
22 Después de esto, sucedió que Dios puso a prueba a Abrahán, y lo llamó: «¡Abrahán!» Y él respondió: «¡Aquí estoy!» 2 Y
Dios le dijo: «Toma ahora a Isaac, tu único hijo, al que tanto amas, y
vete a la tierra de Moriah. Allí me lo ofrecerás en holocausto, sobre
uno de los montes que yo te diré.»
3 Al
día siguiente, Abrahán se levantó, le puso la albarda a su asno, y se
llevó consigo a dos de sus siervos y a su hijo Isaac. Cortó leña para el
holocausto, y se dispuso a ir al lugar que Dios le dijo. 4 Tres días después, Abrahán levantó los ojos y a lo lejos vio el lugar. 5 Entonces Abrahán dijo a sus siervos:
«Esperen aquí, con el asno, y el niño y yo iremos hasta ese lugar; allí adoraremos, y luego volveremos aquí mismo.»
6 Y
tomó Abrahán la leña del holocausto, y la echó sobre Isaac, su hijo;
luego, tomó en su mano el fuego y el cuchillo, y juntos siguieron
caminando. 7 Entonces Isaac le habló a Abrahán, su padre, y le dijo:
«Padre mío...»
Y él respondió:
«Aquí estoy, hijo mío.»
Isaac dijo:
«Aquí están el fuego y la leña, pero ¿dónde está el cordero para el holocausto?»
8 Y Abrahán respondió:
«Dios proveerá el cordero para el holocausto, hijo mío.»
Y juntos siguieron caminando. 9 Cuando
llegaron al lugar que Dios le había dicho, Abrahán edificó allí un
altar, luego acomodó la leña, y atando a Isaac su hijo lo puso en el
altar, sobre la leña. 10 Entonces extendió Abrahán su mano y tomó el cuchillo para degollar a su hijo. 11 Pero el ángel del Señor lo llamó desde el cielo, y le dijo:
«¡Abrahán, Abrahán!»
Y él respondió:
«¡Aquí estoy!»
12 Y el ángel dijo:
«No extiendas tu mano sobre el niño, ni le hagas nada. Yo sé bien que temes a Dios, pues no me has negado a tu único hijo.»
13 Abrahán
levantó entonces los ojos, y vio que a sus espaldas había un carnero,
trabado por los cuernos en un zarzal. Y Abrahán fue y tomó el carnero, y
lo ofreció en holocausto en lugar de su hijo. 14 A ese lugar Abrahán le puso por nombre «El Señor proveerá.» Por eso es que aún hoy se dice: «En un monte el Señor proveerá.»
Romanos 4:18-21
Reina Valera Contemporánea (RVC)
18 Contra
toda esperanza, Abrahán creyó para llegar a ser padre de muchas
naciones, conforme a lo que se le había dicho: «Así será tu
descendencia.» 19 Además, su fe no flaqueó al considerar su cuerpo, que estaba ya como muerto (pues ya tenía casi cien años), o la esterilidad de la matriz de Sara. 20 Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en la fe y dio gloria a Dios, 21 plenamente convencido de que Dios era también poderoso para hacer todo lo que había prometido.
Hebreos 11:8-19
Reina Valera Contemporánea (RVC)
8 Por
la fe, Abrahán obedeció cuando fue llamado, y salió sin saber a dónde
iba, y se dirigió al lugar que iba a recibir como herencia. 9 Por
la fe, habitó en la tierra prometida como un extraño en tierra extraña,
y vivió en tiendas con Isaac y Jacob, quienes eran coherederos de la
misma promesa; 10 porque esperaba llegar a la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios. 11 Por
la fe, Sara misma recibió fuerzas para concebir, aunque era estéril, y
dio a luz, aun cuando por su edad se le había pasado el tiempo, porque creyó que era fiel quien le había hecho la promesa. 12 Por
eso también, de un solo hombre, que ya estaba casi muerto, llegó a
tener una multitud de descendientes, tan numerosos como las estrellas
del cielo y tan incontables como la arena que está a la orilla del mar.
13 Por
la fe, todos ellos murieron sin haber recibido lo que se les había
prometido, y sólo llegaron a ver esto a lo lejos; pero lo creyeron y lo
saludaron, pues reconocieron que eran extranjeros y peregrinos en esta
tierra. 14 Porque los que dicen esto, claramente dan a entender que buscan una patria; 15 pues si hubieran estado pensando en la patria de donde salieron, tiempo tenían para volver. 16 Pero
ellos anhelaban una patria mejor, es decir, la patria celestial. Por
eso Dios no se avergüenza de llamarse su Dios; al contrario, les ha
preparado una ciudad.
17 Por la fe, cuando Abrahán fue puesto a prueba, ofreció a Isaac; y el que había recibido las promesas ofrecía a su único hijo, 18 a pesar de que Dios le había dicho: «Por medio de Isaac te vendrá descendencia». 19 Y
es que Abrahán sabía que Dios tiene poder incluso para levantar a los
muertos; y en sentido figurado, de entre los muertos lo volvió a
recibir.
Fuente de información:
http://www.biblegateway.com/passage/?search=Genesis%2022:1-10;%20Romans%204:18-21;%20Hebrews%2011:8-19